ARTICULO DE OPINIÓN // ATRACO NUESTRO PAN DE CADA DIA” // POR FEDERICO MAÑAN

Como si fuera una película del oeste, estamos siendo asaltados constantemente y en nuestras narices; pero lo más extraño es que nos asaltan sin pistolas y sin amenazas. 

Esto sucede a cada momento, puede ser en un establecimiento comercial, en el supermercado, la calle, el colegio, el carro,  la universidad, o en cualquier lugar. 

Lo grande es que nos estamos acostumbrando a cogerlo chilling.

Por ejemplo las estaciones de gasolina, se han convertido en una especie de terror, no solo por las constantes alzas dispuestas por el Ministerio de Industria y Comercio, sino por el robo a la franca de que somos objetos cada vez compramos gasolina, los artífices de esta fechoría se hacen llamar bomberos, que de bomberos no tienen nada, porque en vez de apagar el fuego lo están encendiendo.

Todo se ejecuta de una forma magistral, simplemente te echan menos combustible del que tú pagas; pero mi queja no es por la forma como se ejecuta el robo, es por lo robótico o pendejo en que nos estamos convirtiendo. 

La trama se realiza por la falta de atención o el interés que mostramos.

Siempre que vamos a echar gasolina, lo cogemos para hablar por el celular y si es una mujer aprovecha el tiempo para maquillarse u otras nimiedades y nunca nos percatamos de verificar la cantidad de combustible que pedimos.

Sabemos que eso es así y sin embargo dejamos que suceda. No sé cuál es la razón, o será que nos estamos haciendo cómplices de lo deshonesto?  O acaso nos importa un comino que nos engañen en la cara? En conclusión qué carajo son 50 o 100 pesos menos de nuestro presupuesto.

Ustedes se imaginan cuanto les roban los bomberos de gasolina a diario?

Son los administradores culpables de este abominable hecho? O  Será que a los bomberos no les pagan lo suficiente y recurren a esta práctica ilisita.

Como dice la canción, “espabílate candita”