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NUESTRO EDITORIAL // EN RIESGO DE PERDIDA

EL RADAR.COM,Lo advirtió el obispo de la diócesis de San Juan de la Maguana, José Dolores Grullón y ahora ha sumado su voz para hacerle coro el senador Eddy Mateo, quien preside la Comisión de Educación de la alta cámara. 

Este califica de irresponsable la actitud de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP), debido a la huelga que desde hace días mantiene paralizada la docencia en San Cristóbal, Barahona, otras localidades del sur y del este.

Damos por sobre entendido que el legislador se refiere específicamente a las seccionales del gremio profesoral que controlan la enseñanza en esos lugares y se mantienen rebeldía frente al acuerdo firmado por el presidente de la ADP, Eduardo Hidalgo, con el Ministro de Educación, Andrés Navarro, en días recientes.

Mediante dicho acuerdo, los maestros obtienen un aumento de un diez por ciento en sus salarios que será cobrado a partir del próximo mes de agosto, además de otras conquistas, entre estas la aplicación del pago del incentivo por rendimiento que pudiera elevar aún más sus emolumentos entre un 17 y un 32 por ciento.  Las seccionales que mantienen el paro reclaman el cobro inmediato del aumento.

Se trata de una actitud a todas luces inconsecuente.  Si un sector ha sido favorecido como ningún otro en los últimos cinco años ha sido precisamente el de los educadores, que han visto sus salarios incrementados en más de un 62 por ciento y que a partir del cobro de este nuevo aumento, se elevará al 72, sin contar el incentivo por rendimiento. 

La retribución de los maestros dominicanos, tal como advierte EDUCA, se equipara hoy con los más elevados de la región.  Esto así, pese a que una gran parte del magisterio muestra un bajo nivel de preparación para impartir una docencia de calidad como la que requiere el país.   Las mediciones regionales en que salimos tan mal librados, son una buena evidencia de ello.  Los que han fracasado en esas pruebas no son los alumnos, sino los maestros que han sido incapaces de impartirles una adecuada preparación.   En todo caso, el pobre desempeño de los educandos es simple reflejo y consecuencia del pobre nivel de docencia recibido.

Esa es la verdad monda y lironda, confirmada por las evaluaciones a que en distintas ocasiones ha sido sometido el magisterio, con unos resultados tan penosos que dejan al descubierto sus deficiencias y han obligado al Ministerio a dedicar una sustanciosa partida de miles de millones de pesos  para  impartirles cursos intensivos de capacitación.

Tal como advierte el obispo Grullón y agrega ahora el senador Mateo, la irracional actitud adoptada por las seccionales en huelga pone en serio peligro de naufragio el año escolar, lo que representaría un paso más de retroceso en nuestro muy deficiente  sistema educativo.  

La irracional actitud asumida por las seccionales en huelga constituye una flagrante violación de la Ley General de Educación que prescribe cinco días a la semana de clases durante el año escolar, más el incumplimiento del Pacto por la Educación donde se asumió el compromiso de no perder ni un solo minuto de docencia.  Algo que debe resultar objeto tanto del repudio de los padres de los miles de alumnos privados injustamente del sagrado pan de la enseñanza y de rechazo del propio gremio profesional,  como de las acciones más enérgicas por parte del Ministerio de Educación para someter a quienes de manera tan injusta e injustificada están faltando a su deber.MR

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