Vargas valora comicios del domingo en Haití; ve fracaso del Gobierno en manejo relaciones
Santo Domingo...El presidente del Partido Revolucionario Dominicano, Miguel Vargas, dijo esperar que tanto las autoridades haitianas como la comunidad internacional hagan un esfuerzo extraordinario, en estos últimos días, para estimular la más alta participación factible y un certamen lo más íntegro posible en el proceso electoral a verificarse en el vecino país el próximo domingo. La exhortación del líder político dominicano estuvo especialmente dirigida a la Organización de las Naciones Unidas, la Organización de Estados Americanos y el CARICOM, instituciones que proveen asistencia técnica electoral a través de la Misión de Observación Electoral conjunta OEA/CARICOM.
Vargas afirmó que no debe existir duda alguna que el éxito de las autoridades haitianas que surjan de las elecciones del próximo 28 de noviembre, y por tanto la estabilidad política en Haití, dependerá en buena medida del apoyo financiero y técnico oportuno que reciba el gobierno para tomar las medidas apropiadas para resolver las apremiantes necesidades que enfrenta el pueblo haitiano, incluyendo la reubicación a viviendas permanentes a las personas desplazadas y que hoy viven en campamentos temporales.
El gobierno que surja de estas elecciones estará en el poder de febrero de 2011 hasta febrero de 2016. A ese nuevo gobierno le tocará llevar a cabo el grueso de la recuperación y reconstrucción de Haití. “Para lograr el apoyo nacional e internacional, ambos esenciales para el futuro de Haití, el gobierno requerirá la legitimidad que solo puede surgir de unas elecciones libres, democráticas, transparentes y justas, en las cuales tenga la oportunidad de votar la mayoría del pueblo haitiano”, dijo Vargas en rueda de prensa efectuada en la casa nacional del PRD, acompañado de Peggy Cabral, secretaria de Asuntos Internacionales del PRD, y de Roberto Álvarez, su colaborador en el área, y otros dirigentes.
Convencido de que los acontecimientos en Haití son de especial interés para la agenda dominicana, y de la crucial importancia de la legitimidad de los comicios del domingo, Vargas puntualizó que la estabilidad política y la reconstrucción de Haití son complementarias y que el fracaso de una, socava la otra.
Agregó que “por esto, nos permitimos levantar nuestra voz, a nombre del PRD, haciendo un llamado urgente y respetuoso a la comunidad internacional, que se comprometió a apoyar la reconstrucción de Haití, a cumplir con los compromisos que asumieron en la Conferencia de Donantes de marzo de este año en las Naciones Unidas, haciendo una realidad sus ofrecimientos”.
Recordó que sin distinción de bandería alguna el pueblo dominicano, gobierno y oposición, expresamos con acciones y recursos inmediatos nuestro apoyo solidario a Haití, en sus horas más difíciles a raíz del terremoto. Toda esta ayuda fluyó y sigue fluyendo -sin escatimar esfuerzos- a un gran costo para los dominicanos.
Vargas citó una declaración de la Conferencia del Episcopado Dominicano de noviembre de 2005, mensaje que hizo suyo, de que “No faltan personas y grupos que irresponsablemente proclaman que la República Dominicana debe asumir casi en solitario el sacar a Haití de su situación. Nosotros somos una nación con reducida capacidad para una excesiva inmigración solidaria, dado el alto índice de desempleo, poca industrialización, dificultades económicas y la no fuerte institucionalización”.
Dijo también estar de acuerdo con las palabras del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP) expresadas en 2004, en el sentido de que “el tema haitiano es prioritario en la agenda nacional. Haití, concomitantemente con los Estados Unidos, es la nación a la que debemos prestar mayor atención…”
Condena inercia del Gobierno.
Vargas dijo que ante el dramático cuadro que se presenta en Haití y las estrechas relaciones entre los dos países, “resulta incomprensible que en seis años en el poder, el gobierno del PLD no haya logrado definir una política de Estado coherente sobre Haití”.
Deploró que todavía hoy carezcamos de una política que –plenamente informada de los mejores intereses de la nación dominicana- abarque temas como: salud; desarrollo fronterizo; medio ambiente; empleo; migración; lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico; tráfico y trata de personas; cooperación económica, científica y cultural; reforestación; delimitación marítima; telecomunicaciones; remesas; desarrollo de proyectos conjuntos; y seguridad nacional.
Puntualizó que necesitamos definir una política de Estado en relación a Haití, que permita el desarrollo de medidas coherentes, eficaces y equilibradas, así como las políticas públicas necesarias, indispensables y visionarias para proteger -primero y ante todo- nuestros intereses nacionales, y a la vez los derechos de los migrantes.
Informó que como presidente del PRD está designando una comisión de especialistas para que redacten un documento con lineamientos sobre la relación bilateral dominico-haitiana, con el objetivo de someter dicho estudio a las instancias políticas del Partido, como insumo principal en la elaboración de un proyecto de política de Estado que pueda ser adoptada una vez llegue el PRD al poder.
Dijo que a ese propósito ha invitado a profesionales conocedores de las relaciones dominico-haitianas, algunos militantes, otros amigos del Partido, a que integren dicha comisión.
Concluyó “deseando todo el éxito posible a las autoridades y al pueblo haitiano en estas trascendentales elecciones y nos comprometemos desde ya a trabajar de manera mancomunada con el nuevo gobierno que salga de las urnas por el desarrollo sinérgico de nuestras naciones”.
Vargas afirmó que no debe existir duda alguna que el éxito de las autoridades haitianas que surjan de las elecciones del próximo 28 de noviembre, y por tanto la estabilidad política en Haití, dependerá en buena medida del apoyo financiero y técnico oportuno que reciba el gobierno para tomar las medidas apropiadas para resolver las apremiantes necesidades que enfrenta el pueblo haitiano, incluyendo la reubicación a viviendas permanentes a las personas desplazadas y que hoy viven en campamentos temporales.
El gobierno que surja de estas elecciones estará en el poder de febrero de 2011 hasta febrero de 2016. A ese nuevo gobierno le tocará llevar a cabo el grueso de la recuperación y reconstrucción de Haití. “Para lograr el apoyo nacional e internacional, ambos esenciales para el futuro de Haití, el gobierno requerirá la legitimidad que solo puede surgir de unas elecciones libres, democráticas, transparentes y justas, en las cuales tenga la oportunidad de votar la mayoría del pueblo haitiano”, dijo Vargas en rueda de prensa efectuada en la casa nacional del PRD, acompañado de Peggy Cabral, secretaria de Asuntos Internacionales del PRD, y de Roberto Álvarez, su colaborador en el área, y otros dirigentes.
Convencido de que los acontecimientos en Haití son de especial interés para la agenda dominicana, y de la crucial importancia de la legitimidad de los comicios del domingo, Vargas puntualizó que la estabilidad política y la reconstrucción de Haití son complementarias y que el fracaso de una, socava la otra.
Agregó que “por esto, nos permitimos levantar nuestra voz, a nombre del PRD, haciendo un llamado urgente y respetuoso a la comunidad internacional, que se comprometió a apoyar la reconstrucción de Haití, a cumplir con los compromisos que asumieron en la Conferencia de Donantes de marzo de este año en las Naciones Unidas, haciendo una realidad sus ofrecimientos”.
Recordó que sin distinción de bandería alguna el pueblo dominicano, gobierno y oposición, expresamos con acciones y recursos inmediatos nuestro apoyo solidario a Haití, en sus horas más difíciles a raíz del terremoto. Toda esta ayuda fluyó y sigue fluyendo -sin escatimar esfuerzos- a un gran costo para los dominicanos.
Vargas citó una declaración de la Conferencia del Episcopado Dominicano de noviembre de 2005, mensaje que hizo suyo, de que “No faltan personas y grupos que irresponsablemente proclaman que la República Dominicana debe asumir casi en solitario el sacar a Haití de su situación. Nosotros somos una nación con reducida capacidad para una excesiva inmigración solidaria, dado el alto índice de desempleo, poca industrialización, dificultades económicas y la no fuerte institucionalización”.
Dijo también estar de acuerdo con las palabras del Consejo Nacional de la Empresa Privada (CONEP) expresadas en 2004, en el sentido de que “el tema haitiano es prioritario en la agenda nacional. Haití, concomitantemente con los Estados Unidos, es la nación a la que debemos prestar mayor atención…”
Condena inercia del Gobierno.
Vargas dijo que ante el dramático cuadro que se presenta en Haití y las estrechas relaciones entre los dos países, “resulta incomprensible que en seis años en el poder, el gobierno del PLD no haya logrado definir una política de Estado coherente sobre Haití”.
Deploró que todavía hoy carezcamos de una política que –plenamente informada de los mejores intereses de la nación dominicana- abarque temas como: salud; desarrollo fronterizo; medio ambiente; empleo; migración; lucha contra el crimen organizado y el narcotráfico; tráfico y trata de personas; cooperación económica, científica y cultural; reforestación; delimitación marítima; telecomunicaciones; remesas; desarrollo de proyectos conjuntos; y seguridad nacional.
Puntualizó que necesitamos definir una política de Estado en relación a Haití, que permita el desarrollo de medidas coherentes, eficaces y equilibradas, así como las políticas públicas necesarias, indispensables y visionarias para proteger -primero y ante todo- nuestros intereses nacionales, y a la vez los derechos de los migrantes.
Informó que como presidente del PRD está designando una comisión de especialistas para que redacten un documento con lineamientos sobre la relación bilateral dominico-haitiana, con el objetivo de someter dicho estudio a las instancias políticas del Partido, como insumo principal en la elaboración de un proyecto de política de Estado que pueda ser adoptada una vez llegue el PRD al poder.
Dijo que a ese propósito ha invitado a profesionales conocedores de las relaciones dominico-haitianas, algunos militantes, otros amigos del Partido, a que integren dicha comisión.
Concluyó “deseando todo el éxito posible a las autoridades y al pueblo haitiano en estas trascendentales elecciones y nos comprometemos desde ya a trabajar de manera mancomunada con el nuevo gobierno que salga de las urnas por el desarrollo sinérgico de nuestras naciones”.
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